Lecturas del Convenio Unido para el Lunes, 24 de Noviembre, 2025

Giliana Kudsha

Adorad a Dios y Honrad a Su Mensajero

¡Adorad al único Dios, porque Él es vuestro Creador y vuestro Rey! Ya sea que llaméis al Creador por el Nombre de Yahweh, Mar-Yah o Zurvan, Él es un solo Dios. Hay muchos seres celestiales llamados por el título de Dios, pero el Creador es el Dios Altísimo y es Él quien merece adoración.

Ya sea que llaméis al Mensajero por el nombre de Jesús, Izgadda u otros nombres, debéis saber que los Mensajeros Divinos son iguales. Soy Izgadda y soy del mismo árbol como lo son todos los demás Mensajeros Divinos enviados por el Creador. No soy más que una rama de ese mismo árbol. Somos luz de luz. No hay ninguna distinción.

Adorad a Dios y honrad a Su Mensajero.

Enseñanzas de la Luz Capítulo 94:

Saliendo de la Casa del Islam

1 Cuando una persona abandona la casa del Islam, tiene mucho trabajo por delante para eliminar la suciedad que es parte de la ideología Islámica, pero con la ayuda de la Verdad y la Luz, esto se puede lograr.

2 Nadie que abandona el Islam y se une a la casa del verdadero Todopoderoso es llamado musulmán o musulmana.

3 Aquel que desee venir al Creador Jehová debe tomar el Escudo de Abraham entrando en un pacto con el Padre de la Grandeza, y nunca debe regresar a los antiguos caminos de las tinieblas.

4 Dentro de la Religión de la Luz hay varias comunidades que individuos y familias encontrarán adecuadas para sus necesidades – porque los hijos e hijas de Ismael no se quedarán sin esperanza, si huyen rápidamente de la oscuridad ahora.

5 No abandonaré a nadie que permanezca con Jehová el Creador.

El Evangelio de Mar Mani Capítulo 33:

1 El hombre en el que está la Mente de la Luz, suya es la Sabiduría; tan pronto como la oye, la recibe para sí mismo; pero aquel en el que no hay Mente, que es ajeno a ella, no se la toma para sí mismo, ni la escucha, porque es como un hombre sordo.

2 Y cada Alma débil que no ha aceptado la Verdad que le pertenece perece sin descanso o sin felicidad.

3 La Voz* de Dios es dulce cuando encuentra oídos para oírla; no se aloja en una mente cerrada y no se abre paso en un santuario contaminado. Se alberga en vírgenes, y habita en el corazón de los célibes; su gracia eclipsa a aquellos con los que se aloja, así que se ciñen sus lomos, y se arman a sí mismos para luchar contra la serpiente malvada.

* (la Palabra)

5 Los Benditos aceptarán esta Ofrenda, los Sabios sabrán, los Fuertes volverán a buscar la bondad de los Doctos.

6 Bendito de verdad debe ser considerado el que ha sido iniciado en este Conocimiento Divino*, por el cual ha sido liberado y continuará en la perfección y en la vida eterna.

* (gnosis – véase Fnd 1:3; EdS 4:6)