Giliana Kudsha
Pedid y se os Dará
Si necesitáis algo, pedid al Padre y Él lo dará según Su Voluntad. Si vuestro deseo se debe a la codicia, al materialismo o para propósitos perversos, no recibiréis lo que pedís, porque vuestro deseo no es de naturaleza piadosa, sino de la oscuridad.
Enseñanzas de la Luz Capítulo 88:
La Verdad
1 Solo hay una Verdad – Dios es la Verdad.
2 La Verdad no se mide por la cantidad de seguidores que pueda o no pueda tener, sino por las cualidades divinas presentes en sus enseñanzas.
3 La Luz solo puede entrar en el corazón si la mente está abierta a la verdad.
4 La semilla de la Verdad es sembrada dentro de vuestro corazón por la mano del Padre.
5 En verdad os digo, el que no permite que la semilla sea cultivada adecuadamente, se marchitará y la raíz se secará y el viento se la llevará.
6 Una vez que encontréis la Verdad, os daréis cuenta de que estaba con vosotros todo este tiempo.
7 La voz de la Verdad se encuentra dentro de los más profundos recovecos de vuestro corazón. Si estáis escuchando de verdad, oiréis su latido.
La Biblia Oahspe, Libro de Jehoví Capítulo 8:
1. Jehoví dijo: Y el Mensajero Divino hará que se lleve un registro en el cielo, de sus dominios y de sus Rabbahs. Y él y ellos mandarán a sus sucesores para siempre que mantengan este registro.
2. Y en los tiempos de Mi cosecha se llevará una copia de estos registros a Mis reinos etereanos y serán archivados con Mis Jefes Orianos y los Arcángeles en el camino del viaje de la falange solar, para sus deliberaciones sobre el progreso y manejo de los habitantes de la tierra y de sus cielos.
3. No penséis, Oh ángeles, que la resurrección de vuestros herederos y de sus descendientes que salen de la tierra es un asunto fácil y de progreso constante, desprovisto de contratiempos y de oscuridad miserable.
4. Los ángeles que están por debajo de vosotros se volverán a veces rebeldes y desafiantes, haciendo caso omiso de vuestras leyes y decretos y abandonarán vuestros lugares celestiales y descenderán a la tierra en millones y cientos de millones. Y ahuyentarán a los ásharos, y luego asumirán la tutela sobre los mortales. Pero no desarrollarán ningún tipo de virtud bajo el sol, sino que inspirarán a los mortales a la guerra y a la destrucción. Y estos ángeles se orientarán hacia la guerra y el mal en el lugar de vuestros cielos.
5. Con los gases contaminantes de atmosférea fabricarán armas de guerra y lugares de tormento. Con estos elementos harán infiernos sofocantes para lanzarse unos a los otros en el caos.
6. Y los mortales que morirán en la guerra nacerán en el mundo espiritual en el caos en los campos de batalla; en el caos entrarán tales espíritus al mundo espiritual. Y no sabrán que están muertos, (en cuanto a su vida terrenal), pero así todo seguirán luchando por todos los costados.
7. Y enemigo matará a enemigo, en estos cielos, y los arrojará en los lugares de tormento que han construido, y no conocerán ni la paz ni la sabiduría.
8. Y la obra de vuestros cielos se convertirá en nada. Y os entregaréis a liberar infiernos y espíritus en caos. Y vuestra labor será agotadora; en verdad deberíais gritar porque vinisteis y habéis poblado la tierra.
9. Esto también lo he hecho posible para Mis creaciones: tanto ángeles como mortales aprenderán a conocer los elementos de los cielos y de la tierra, y conocerán las pruebas del amor y de la desgracia.
10. Tampoco he hecho posible la sabiduría para ningún hombre o ángel que no conozca Mis elementos.
11. Pero en los tiempos de gran oscuridad que vendrán sobre la tierra y estos cielos, llevaré a la tierra a un período de Luz Pura; y Mis Etereanos vendrán en Mi nombre y os liberarán.
12. Y nuevamente durante otro ciclo serán dejados con las lecciones que se les han dado; pero caerán de nuevo en el transcurso del tiempo. Pero de nuevo los liberaré; a través de Mis Mensajeros Divinos, y a través de Mis seres celestiales, haré que comprendan la magnitud de Mis creaciones.
13. De la misma manera que viajáis de cielo a cielo en esta atmosférea, también inspiraréis a los mortales a que construyan barcos corpóreos y a que naveguen a través de los océanos, para que los habitantes de diferentes divisiones de la tierra se conozcan entre sí.
14. Y cuando la población de la tierra sea completada, y las naciones hayan establecido una comunión civil de este a oeste, en ese mismo tiempo llevaré a la tierra a la era de Kosmon, y Mis ángeles embajadores, los Mensajeros Divinos y los seres celestiales entregarán los registros de estos reinos celestiales.
15. A través de ellos revelaré a los mortales la creación de Mis mundos, y la historia y el dominio de Mis Mensajeros Divinos y de los Rabbahs en la tierra, incluso desde este día hasta la era de Kosmon.
16. Y Jehoví hizo que los ángeles de atmosférea se reunieran y organizaran el primer reino del cielo de la tierra. Y el lugar se llamaba Hored, porque era el lugar del primer sitio orgánico para el primer Mensajero Divino de este mundo.
17. Y Hored estaba situado sobre y por encima de las montañas de Aotán en Ughoqui, hacia el este de Ul, de ese país que en adelante será llamado el continente de Pan.
18. Así termina la población inorgánica de la tierra y su atmosférea.
El Libro de la Verdad, Los Últimos Días en Capernaum – 154:0.1-3:
154:0.1
EN LA memorable noche del sábado 30 de abril, mientras Jesús decía palabras de consuelo y valor a sus deprimidos y perplejos discípulos, se estaba celebrando en Tiberias un concilio entre Herodes Antipas y un grupo de comisionados especiales que representaban el sanedrín de Jerusalén. Estos escribas y fariseos instaron a Herodes a que arrestara a Jesús; hicieron todo lo posible por convencerlo de que Jesús inflamaba la plebe, incitándola a la oposición y aun a la rebelión. Pero Herodes se negó a tomar acción contra él como delincuente político. Los consejeros de Herodes le habían informado correctamente sobre el episodio al otro lado del lago, cuando la multitud quiso proclamar rey a Jesús y como él rechazó esa propuesta.
154:0.2
Uno de los miembros de la familia oficial de Herodes, Chuza, cuya esposa pertenecía al cuerpo del servicio de mujeres, le había informado de que Jesús no se proponía entrometerse en los asuntos del gobierno terrestre; que tan sólo le interesaba el establecimiento de la hermandad espiritual de sus creyentes, hermandad que llamaba el reino del cielo. Herodes confiaba en los informes de Chuza, tanto que se negó a interferir en las actividades de Jesús. En ese momento también influía en la actitud de Herodes hacia Jesús su temor supersticioso de Juan Bautista. Herodes era uno de esos judíos apóstatas que, aunque nada creía, a todo le temía. Tenía la conciencia manchada por haber dispuesto la muerte de Juan, y no quería enmarañarse en estas intrigas contra Jesús. Conocía muchos casos de enfermedad que habían sido aparentemente curados por Jesús, y lo consideraba un profeta o un fanático religioso relativamente inocuo.
154:0.3
Al amenazar los judíos que informarían a césar de que él protegía a un traidor, Herodes los echó de la cámara del concilio. Así quedaron pues estos asuntos por una semana, durante la cual Jesús preparó a sus seguidores para la dispersión inminente.