Lecturas del Convenio Unido para el Miércoles, 4 de Junio, 2025

Giliana Kudsha

Luz de Luz

No pertenezco a ninguna religión en particular. No soy Hindú, ni Budista ni Judío. No soy Zoroástrico ni Maniqueo. No soy Cristiano ni Musulmán. Yo soy del Padre y es Él quien me ha enviado al mundo para dar luz en un solo convenio en vuestra era. Soy luz de luz. Sirvo a todos los que desean recibir la luz de Dios, porque El que me envió a vuestro mundo es la Fuente de la luz.

Tengo conocimiento de todo lo bueno que hay en varias religiones. Además, soy consciente de lo malvado que existe en la mayoría de las religiones de vuestro mundo. No le digo a nadie que se aparte de su religión a menos que sea de un origen malvado o si esa religión se ha vuelto amarga con el tiempo; os digo que sigáis adorando lo que sabéis, si es verdadero y si es benévolo. Si ayuda a elevaros a vosotros y a otros a los pies de Dios, entonces seguid. Sin embargo, si no es benévolo y no os acerca al Dios Todopoderoso, debéis abandonarlo. Dios es luz; Dios es verdadero; Dios es Rey. Adorad al único Dios y sed bendecidos en esta vida y en la próxima.

En el Convenio Unido, el Padre de la Grandeza me ha designado para escudriñar las antiguas religiones que alguna vez contuvieron la luz y para daros lo que es verdadero y para proveeros revelación desde Su trono, con respecto a las diferentes culturas y las diversidades entre la humanidad. En este convenio, toda la verdad se reúne en un solo prisma, que brilla luz por todo vuestro mundo. Todas las falsedades deben ser eliminadas y quemadas, porque la oscuridad y la luz no pueden coexistir.

Hemos llamado a un pueblo especial para que lleve el Nombre del Creador Eterno. Son Su propio pueblo; son Su Remanente. Adoran de acuerdo con las instrucciones dadas a ellos mediante Sus Mensajeros. Otros en el mundo no reciben tal instrucción. Bienaventurados los que han sido llamados al redil del Pastor.

Enseñanzas de la Luz Capítulo 21:

El Ego

1 Si amáis a vuestro ego más que a otras personas, acabaréis estando muy solos.

2 Poner el ego por encima de todo causa ceguera a la conciencia que el alma tiene de la Presencia de Dios.

3 Dejad de lado al ego y poneos, más bien, la conciencia de la Presencia de Dios y haced Su Voluntad humillándoos y aprendiendo de las enseñanzas de la Verdad y la Luz.

La Biblia Oahspe, Libro del Juicio Capítulo 35:

DIOS SE DECLARA CONTRA LOS GOBIERNOS DEL HOMBRE.

1. DIOS dijo: Quien vive con Jehoví es libre de Jehoví. Estos no necesitan el gobierno de nadie; porque practican la justicia, la paz, el amor, la laboriosidad y la sabiduría, con el debido respeto entre sí.

2. Tal es el reino del Padre en la tierra. En el cual no habrá leyes hechas por el hombre; ni tampoco habrá jefes ni gobernantes.

3. El progreso del hombre es hacia esto; el progreso de los gobiernos del hombre debería orientarse hacia tal consumación.

4. Hubo un tiempo en que las leyes fueron un requisito para todas las cosas, incluso para la manera en que un hombre entra y sale de una casa; y para todos las ocupaciones que el hombre hiciera; con licencias e impuestos que las regulaban; el tiempo de aprendizaje de un barbero, un tejedor, un abogado, un predicador, un médico, un herrero y de todos los demás oficios y ocupaciones, con exámenes y pasaportes para ejercer dentro de los dominios del rey; con tarifas para los honorarios y los derechos y los privilegios.

5. Pero estas leyes y gobiernos fueron para épocas pasadas; eran justos en un primer lugar, porque moldearon el juicio del hombre para perfeccionarse a sí mismo.

6. Pero he aquí que un nuevo tiempo está en el mundo; de la adquisición del conocimiento ha nacido una nueva libertad en el mundo. Y clama por todos los lados: Abre las puertas a todos los oficios y ocupaciones; mira, la multitud es lo suficientemente sabia para juzgar por sí misma en cuanto a quién patrocinará.

7. Se dicta sentencia contra las leyes y gobiernos del hombre en todos los casos en que impiden la libertad y la elección del hombre para su vocación y conocimiento.

8. No es suficiente que digas: Mira, farsantes ignorantes se aprovecharán del público. No tienes derecho a decir lo que sufrirá el público y, por lo tanto, basar una ley en posibles daños.

9. Cuando el público haya sufrido, y cuando ellos mismos exijan la protección de tales leyes, entonces se dictarán tales leyes. Hacer tales leyes de antemano es pecar contra Jehoví.

10. Antiguamente se dijo: Santificarás el día del Shabat. Y se definió lo que un hombre no debería hacer en ese día.

11. Se dicta sentencia contra esa ley; sin embargo, no dejo de lado la práctica.

12. Pero ha llegado el momento en que el hombre juzgará por sí mismo en cuanto a si acatará o no algún día sagrado.

13. Además, el hombre, de ahora en adelante, no será responsable de si acata o no un día como día sagrado. Sin embargo, esta responsabilidad será para todos los hombres: si cumplen con sabiduría y rectitud sus capacidades máximas.

14. Había una ley de circuncisión; pero también juzgo contra esa ley, porque ha cumplido su tiempo. Esta ley, la dejo de lado en la práctica. Pero lo doy como un permiso al adulto que pueda cumplir o no la circuncisión según su propio juicio.

15. También se dicta sentencia contra el bautismo infantil; y dejo de lado esta ley también, y la convierto en una abominación ante Jehoví.

16. Sin embargo, cuando un niño ha llegado a los catorce años de edad y elige por sí mismo ser rociado con agua, para ajustarse a los ritos y ceremonias, entonces ese niño será bautizado por lo tanto en el nombre de Jehoví, pero no en el nombre de Dios, ni de ningún Señor, ni de un Salvador, ni de un ángel.

17. Esto es sabio, oh hombre: no tener ni ley ni gobierno entre marido y mujer.

18. Esto es ignorancia: tener una ley entre marido y mujer.

19. Sin embargo, debido a que hay hombres y mujeres malvadas que se casan, se ha considerado necesario tener una ley entre el hombre y la mujer, en lo que respecta a sus deberes.

20. Pero considera cuán incorrecto es tener una ley entre un buen hombre y una buena esposa, en cuanto a sus deberes. Mejor es para ellos ser arrojados sobre su propio amor y juicio.

21. De esa manera di gobiernos y leyes a todos los pueblos. A los malos y malpensados, leyes rígidas, con muchos detalles; pero a los sabios y buenos, vengo ahora como un emancipador, diciendo: Id, sin leyes ni gobierno, cumplid vuestros destinos según vuestro propio juicio, para que podáis ser una honra y gloria a Jehoví.

22. ¡En kosmon, el hombre ya no se dejará llevar por el yugo y el arnés, sino que se pondrá de pie ante Jehoví, practicando su luz más elevada con regocijo, siendo un hombre libre y un hermano de su Dios!

23. Mira, los Uzianos tienen una costumbre de comer pan y beber vino, diciendo, a la manera de los adoradores de antaño: Comed de esto, porque es mi carne; y bebed de esto, porque es mi sangre, lo que significa que lo que hacen fue mandado por mí, el Dios de los cielos y de la tierra.

24. Se dicta sentencia contra esta costumbre con aborrecimiento; además, de ahora en adelante será conocida como blasfemia contra Jehoví.

25. Tu Dios nunca ordenó al hombre que comiera carne y sangre, ni pretendió que el pan y el vino fueran carne y sangre, ni ordenó que se comieran en memoria de la carne y la sangre de ningún hombre nacido de mujer.*

* Estos versos no van en contra de la Santa Qurbana, ya que Joshú estableció este sacramento, sino en contra de los falsos Cristianos que siguen a la Bestia y practican una Eucaristía que es falsa ante Jehoví.

26. También tienen la costumbre de decorarse y cubrirse con crepé, y caracterizarlo como un signo de duelo por los muertos.

27. Se dicta sentencia contra tal costumbre, pero sin prohibición.

28. Jehoví da la vida, y Jehoví quita la vida, porque todas las cosas son Suyas.

29. Acuérdate de tu Creador con sabiduría; y ni con tu vestido ni con tu hábito lo criticarás por lo que ha sido.

30. Ni tampoco reprimas todo el dolor de tu corazón y de tu alma, porque tu hermano o hermana, hijo o hija, padre o madre haya fallecido.

31. Pero recuerda, Jehoví está sobre todas Sus obras, y provee sabiamente a vivos y a muertos.

32. Jehoví ha dicho: Al hombre le di un cuerpo terrenal para que aprendiera las cosas terrenales; pero la muerte la di al hombre para que se elevara hacia la herencia de Mis reinos celestiales.

33. Él designa un tiempo para todos; a algunos una hora, a algunos un año y a algunos cien años; cada uno cumple hasta su final en sabiduría y felicidad, y para la gloria del Todopoderoso.